La Familia Antinori llega a CW

La finca Tenuta Tignanello está situada entre los valles de los ríos Greve y Pesa, en el corazón de la denominación de Chianti Classico. Entre las dos aldeas de Montefiridolfi y Santa Maria a Macerata, 30 kilómetros al sur de la ciudad de Florencia. En estas 127 hectáreas de viñedos, la familia Antinori, más que en ninguna otra, ha expresado sus principios y filosofía de trabajo: conciliar tradición y modernidad con los vinos que están estrictamente y auténticamente vinculados a sus territorios de origen.

"Los Antinori son el icono de una historia que mira al pasado para avanzar en el el futuro. Una familia que se apoya en valores concretos como perseverancia, paciencia y respeto por el ambiente para producir vinos que buscan la máxima pureza, elegancia y expresión de un específico territorio", revela Allegra Antinori, hija del marqués Piero Antinori.

Todos los vinos producidos por Antinori tienen un denominador común: la armonía. Cada botella esconde un mensaje y cuenta una historia propia. Tignanello, Solaia, Peppoli, Marchesi Antinori Riserva... Son algunas de las etiquetas históricas del grupo Antinori. Probarlas es saborear la excelencia del vino toscano.

SUPERTOSCANO
Uno de los fenómenos vitivinícolas más importantes de las décadas de los 80 y de los 90 fue la irrupción de unos vinos elaborados en diferentes zonas de la Toscana, llamados supertoscanos. Eran unos vinos modernos que incorporaban variedades “nuevas” como la cabernet sauvignon o la merlot y que rompían con el estilo tradicional de zonas como Chianti.

Los viñedos de Tinganello están divididos en pequeñas parcelas que incluyen dos joyas: las 57 hectáreas del viñedo Tignanello y las 20 hectáreas del viñedo Solaia. Las tierras de la finca, de origen Plioceno, tienden a ser delgadas, con escaso abastecimiento de agua y con un esqueleto rico en alberese y galestro, son una característica única que, junto con la posición particular de los viñedos, se encuentran a una altura promedio de 350-400 m snm , han permitido obtener productos con un fuerte carácter y una elegancia acentuada: las uvas disfrutan de días calurosos y noches frescas durante la temporada de crecimiento.

Solaia es un viñedo de 20 hectáreas de la Tenuta Tignanello con exposición suroeste y situado entre 350 y 400 metros sobre el nivel del mar en suelos pedregosos que consisten en arcillas calcáreas y roca caliza. Los marqueses Antinori produjeron este vino por primera vez en 1978.


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